En 2020, Aracelly Brito, enfrentó la muerte de su hija Dominga, a las 36 semanas de gestación. A raíz de la dolorosa situación impulsó la “Ley Dominga”, que este martes fue promulgada por el Presidente Sebastián Piñera. En concreto, la normativa busca brindar apoyo a familias que pierden un hijo en el embarazo, en el parto o a pocos días de nacer.
De este modo, la nueva legislación establece que todas las instituciones de salud deben contar con protocolos para casos de muerte gestacional o perinatal, con manejo clínico y acompañamiento psico-emocional para contener a los padres y al núcleo más cercano. En ese sentido, otorga atención especial, con un estándar donde prime el trato digno y empático, tanto en el establecimiento de salud como también en el lugar de trabajo.
Al respecto, el delegado presidencial regional del Maule, Juan Eduardo Prieto, explicó la importancia de la promulgación. “Es humanizar nuestra sociedad y dignificar a las personas. Estamos dando un gran paso, ya que antes existía un vacío respecto al trato que debe entregarse a los padres que sufren la pérdida de un hijo”.
De hecho, una de cada 4 mujeres sufre la pérdida de un hijo durante su periodo de gestación. “Muchas mujeres viven este dolor en período de gestación y es sumamente importante que madres y padres reciban toda la comprensión que amerita pasar por una pérdida. Como Gobierno, no podíamos estar ajenos y valoramos el aumento de los permisos de trabajo por muerte de un hijo nacido vivo de 7 a 10 días y de 3 a 7 días en caso de pérdida de un hijo en periodo de gestación” dijo la autoridad regional.
En tanto, el seremi (s) de la Mujer y Equidad de Género, Matías Pinochet, acotó que gracias a la normativa se “establece un apoyo, empatía y seguimiento a todas aquellas madres y padres que tuvieron la muerte de un hijo en etapa gestacional. No era reconocido antiguamente en nuestro país y ahora será reconocido gracias al gran esfuerzo que se ha hecho en esta mesa de trabajo”.
La ley considera, además, las siguientes medidas: